
- 06.10.2025
- Blog de Salud Menstrual
Una parte esencial de la vida cotidiana de toda chica es elegir los productos de higiene femenina adecuados. Hoy en día, existe una amplia variedad de marcas que ofrecen compresas, tampones y copas menstruales.
Pero, ¿cuál es la opción más eficaz, cómoda y segura para la salud?
1. Compresas diarias
Muchas personas no pueden imaginar su rutina diaria sin las compresas diarias. Pero, ¿realmente son necesarias en todas las fases del ciclo menstrual? A pesar de su comodidad, las compresas diarias generan un efecto de “invernadero”.
Están en contacto constante con la zona genital externa, y el ambiente cálido y húmedo favorece el crecimiento bacteriano, lo que puede provocar infecciones.
Podrías pensar: “¿Cómo puedo vivir sin ellas? Tengo tantas secreciones que mi ropa interior no las soporta”. ¡No te preocupes! Aquí tienes algunos consejos de ginecólogos:
- elige compresas que vengan envueltas individualmente;
- cámbialas cada 4 horas;
- utiliza opciones sin fragancia;
- la capa superior debe ser blanca, ya que los colorantes pueden causar alergias.
Estos simples consejos te ayudarán a usar las compresas diarias de manera segura.
2. Compresas para la menstruación
Las compresas son uno de los productos más conocidos para prevenir fugas durante la menstruación. Antes, las mujeres usaban compresas caseras de tela, que ofrecían poca protección. Hoy en día, la variedad es enorme: con aroma o sin él, con alas o sin ellas.
Los médicos recomiendan compresas sin fragancia. El tamaño depende de tu tipo de cuerpo y del flujo. Muchos ginecólogos enfatizan que la menstruación es un proceso natural de limpieza, por lo que es mejor usar productos que no “atrapen” el flujo dentro.
El número de gotas que aparece en el empaque indica la capacidad de absorción. Si tienes flujo abundante, elige compresas con más gotas.
Las alas aportan comodidad y previenen fugas laterales.
Existen compresas de día y de noche. Las de día se cambian cada 3–4 horas. Por la noche, como no controlamos el cambio, las compresas nocturnas son más grandes y absorbentes.
3. Copa menstrual
La moderna copa menstrual fue inventada por Leona Chalmers en 1956. Está hecha de materiales suaves y flexibles, lo que facilita su inserción en la vagina.
Al igual que las compresas, las copas vienen en diferentes capacidades y deben elegirse según la anatomía de cada persona. Se deben vaciar y enjuagar cada pocas horas.
Lávate las manos antes de retirar la copa, enjuágala con agua corriente y vuelve a insertarla. Este método es ecológico y muy económico.
Mientras que se necesitan 6–8 compresas o tampones al día, una copa puede reutilizarse durante años.
4. Tampones
Los tampones están hechos de materiales similares a las compresas, pero tienen forma cilíndrica y se insertan en la vagina. Al igual que otros productos, vienen en diferentes tamaños y niveles de absorción (indicados con gotas).
Los tampones son ideales para ir a la playa, practicar deporte o usar ropa ajustada. Sin embargo, existe un riesgo importante: el síndrome de shock tóxico (TSS), que puede causar vómitos, diarrea, fiebre alta, debilidad y mareos. Cambiarlos a tiempo y respetar el tiempo de uso recomendado ayuda a evitar este riesgo.
Además, es importante controlar no solo el cambio de tampones o compresas, sino todo el ciclo menstrual. La app Selin puede ayudarte.
5. Tampones esponja sin hilo
Se parecen a pequeñas esponjas y son de un solo uso. Pueden usarse para nadar o durante relaciones sexuales vaginales, ya que se colocan debajo del cuello uterino. También vienen en distintos tamaños según el flujo.
6. Compresas reutilizables y ropa interior menstrual
Es mejor tratar estos dos por separado.
Las compresas reutilizables están hechas de tela de varias capas y tienen forma de compresa normal. Las alas con broches las mantienen en su lugar. Esta idea parece práctica y económica, pero tiene algunas desventajas.
Al igual que las normales, se deben cambiar cada 3–4 horas o según necesidad. Después de usarlas, deben lavarse. Las lavadoras pueden limpiarlas correctamente solo con detergentes especiales, pero a veces pueden quedar restos de flujo, que con el tiempo favorecen la aparición de moho y bacterias.
La ropa interior menstrual funciona con el mismo principio. También se puede usar junto con la copa, tampones o compresas para ofrecer una protección adicional contra las fugas.
Hemos revisado diferentes productos de higiene femenina. Cada uno tiene sus ventajas —comodidad, practicidad o ecología— y también sus desventajas. No existe una única opción “correcta”; cada persona encontrará la que mejor le funcione.
La única manera de descubrir la opción más confiable y cómoda es probando diferentes alternativas. Y no olvides cambiar tus productos de higiene a tiempo —la app Selin, con su función de recordatorio, puede ayudarte.